LA POESÍA DE LA COLOMBIANA LILIÁN PALLARES Y DEL NEOZELANDÉS CHARLES OLSEN EN LA RACAL
EL JUEVES 27 DE FEBRERO EN COLABORACIÓN
CON “EL TREN DE LOS POETAS”
Lilián Pallares
En una nueva colaboración con “El
Tren de los Poetas”, el salón de actos de la Real Academia Conquense de Artes y
Letras acogerá el jueves 27 del presente mes de febrero, a partir de las siete y
media de la tarde, una doble lectura poética protagonizada por dos escritores
de muy distinto origen geográfico: la colombiana Lilián Pallares y el
neozelandés Charles Olsen.
Nacida en la localidad colombiana
de Barranquilla, Lilián Pallares, poeta, narradora y guionista, reside en Madrid desde el año 2001. Seleccionada entre los diez mejores
escritores jóvenes de Latinoamérica por About.com, New York, en 2011, su pasión
por el folclore, la danza, las raíces afro y el amor por la palabra, le han llevado
a crear el espectáculo “Afrolyrics” en
el que fusiona su decir lírico con elementos visuales y con música de percusión en directo. Ha
publicado el libro de crónicas y relatos Ciudad
Sonámbula (Aldevara) –que
incluye sus dos galardonadas narraciones “Reflexiones
del va y ven” y “Servicio Anónimo”– y el
poemario-disco Voces Mudas (Fundación Progreso y
Cultura). Asimismo ha colaborado en publicaciones como Fragmenta, El
Alambique, Ojos-Venus del MareA o Poetas bajo palabra, figura en las antologías
IdignHadas y ErotizHadas (Unaria) y Las
mejores historias de amor" (Pygmalión Edypro) y en el volumen de relatos La Petición (Amargord). Actualmente
codirige con su compañero en el recital conquense el juego poético en internet “Palabras Prestadas” y la productora audiovisual en el
ámbito literario y artístico Antena
Blue.
Poeta y artista multidisciplinar el neozelandés Charles Olsen (Nelson,
1969) estudió Bellas Artes en Londres y ha expuesto sus pinturas y fotografías
en esa ciudad y en Madrid, Barcelona, Oporto, Paris y Wellington. Además de a las
artes plásticas se dedica a la música, la poesía y el vídeo. Es autor del poemario Sr.
Citizen (Amargord) que aúna
poesía, pinturas, fotos y dibujos. Ha participado en libros como Las mejores historias de amor (Pigmalión Edypro), Alora,
la bien cercada o Poetas Bajo
Palabra” (CLAF) y ha
colaborado en revistas como Revista
Internacional de Poesía y Dibujo o Blackmail press 28 (revista de poesía
neozelandesa). Su cortometraje “La
danza de los pinceles” fue
premiado en el Festival Flamenco
de Cortometrajes de Madrid en
2010 y su video-arte “Frágil” con música de Pieter Nooten fue presentado en Madrid al año
siguiente dentro del espectáculo de danza “Frágil” de la compañía Cómplutum. Como quedó dicho codirige
con Lilán Pallares el juego poético por internet “Palabras Prestadas” y la productora audiovisual Antena Blue.
Su recital poético junto con Lilián Pallares, el pianista Pablo Rubén Maldonado y la bailaora Selene Muñoz, “Agita Flamenco” se presentó en la Bienal de Arte de Venecia de 2011 y en la SGAE, en Madrid, en 2012.
¡Por Dios!
ResponderEliminarSemana Santa en Cuenta
ya oigo al silencio comerse el ritmo
de las palabras muertas en los labios
y las lágrimas de los ojos relucientes como un sol en la tarde caído.
Semana Santa
entre pesares a la vuelta de un año cautivo
como si el tiempo estuviera en sus adentros vacío
y la rueda de la vida
esa que nos lleva por las riberas, colinas, sierras, llanuras
y campos con cultivos
solo sirviera para indicarnos
que estamos en tiempo de sufrir por lo que padeció Cristo.
Cuenca y su Semana Santa
nos trae olores a lo antiguo
y uno que por ser conquense
no renuncia a ninguno de sus principios
siente por lo suyo
lo mismo que sintió Cristo
camino de ese calvario
desde el cual vio llorar a una madre
y sintió el frío
llenarle por dentro antes de lanzar su último suspiro.
Sin Semana Santa
que sería de este nuestro mundo
de lo cotidiano y normal,
de lo moderno y tan raído
que se nos va ya de capa caída como si fuera una gota de aceite diluida
en un remolino.
La palabra como ejemplo,
paz, felicidad, sosiego y goce a ritmo de tambores
y de turbas que se asoman a un precipicio
como si la noche no tuviera horas
y la espiritualidad esa que se destila a través de la tela
que cubre un sepulcro
fuera debida a lo mucho que creemos
y a lo poco que nos importa ser testigos
de una tragedia que se fraguó con un fin último
redimir al mundo para gloria de quien se ofreció en Santo sacrificio.
Autor: José Vte. Navarro Rubio